"Aquí me siento como en casa". Estas fueron las primeras palabras de IKER CASILLAS nada más llegar a su pueblo, Navalacruz, donde se desató la locura. Eran muchas las personas que le esperaban impacientes en la plaza de esta localidad y el guardameta mostoleño no defraudó a nadie ya que no paró de hacerse fotos y de firmar autógrafos.
El portero del Real Madrid tiene un cariño especial a su pueblo y sus paisanos a él. De esta pequeña localidad de Ávila son sus padres y sus abuelos y allí ha pasado muchos de sus veranos . Este último, sin ir más lejos, no dudó en INVITAR A SU MEDIATICA NOVIA SARA CARBONERO, a pasar unos días tras el Mundial. Ahora que es una estrella del fútbol sigue visitando a sus amigos de vez en cuando y cuenta que le encanta quedar en el bar para jugar al mus. "Para mí es un orgullo llevar el nombre de Navalacruz por todo el mundo", declaró el futbolista desde el balcón de su pueblo.
Iker Casillas, nombrado hijo predilecto de Navalacruz
En el mismo momento en que Iker Casillas levantaba la copa de campeones en Sudáfrica, su pueblo se puso de acuerdo para nombrarle hijo predilecto. En la plaza del pueblo se descubrió una figura donde se puede ver un balón y un guante. Es una escultura que representa la unión del pueblo con el futbolista, el símbolo de sus raíces.
Desde el balcón, Casillas recordó el tiempo que pasó en su pueblo y no pudo evitar emocionarse al recordar tantos buenos momentos. Sus paisanos también terminaron emocionados al ver a su figura dándoles las gracias por su apoyo y cariño. En este emotivo encuentro, el astro del balón estuvo acompañado de sus padres, quienes están más que orgullosos de su famoso hijo. Juntos posaron felices y contentos en un día tan especial.
El trabajo impidió a sara carbonero aplaudir a su chico en Navalacruz pero seguro que ya tienen pensado cómo celebrarlo. La periodista ya ha vuelto al trabajo en Telecinco y tras varios cambios de horario parece que regresa al telediario de la tarde. Sin duda son la pareja de moda y en Navalacruz le echaron de menos.
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